Esquilino - Monti

En el alma más abierta de la Capital, se expande el Esquilino, el más elevado de los siete antiguos montes de Roma. Representa también una de las " puertas " de la ciudad: en ella se encuentra la moderna Estación Termini, la mayor de Italia.
La refinada estructura umbertina de finales del siglo XIX marca la fisonomía del barrio que se despliega alrededor de la inmensa Piazza Vittorio Emanuele II, flanqueada por imponentes edificios con pórticos proyectados por el arquitecto Gaetano Koch.
En el centro se sitúan los preciosos jardines Nicola Calipari que se inauguraron en el año 1888 y representan el núcleo verde del barrio. Es uno de los lugares más acogedores donde pasar un día relajado: es posible descansar al sol con plantas exóticas, así como admirar los espectáculos acuáticos de las fuentes y lo que queda de los famosos "Trofeos de Mario", de la era romana, descubrir la maravilla de la Porta Magica asÍ como los restos de la Villa Palombara, originaria del siglo XVII.
Una visita a sus suntuosas iglesias y basílicas, a veces asociadas con antiguas y misteriosas leyendas, no se puede evitar. Así, por ejemplo, Santa Maria Maggiore, erigida en el mes de Agosto del año 352 d.C. según el milagro de la nieve; Santa Croce in Gerusalemme, que custodia la reliquias de la Cruz; el Santuario Pontificio de la Scala Santa, con sus 28 escalones que subió Jesús en el día de su sentencia de muerte, así como Santa Bibiana, la obra arquitectónica por excelencia de Gian Lorenzo Bernini.

Para los amantes del arte, el distrito ofrece una mezcla perfecta de lo antiguo y lo moderno, desde la colección arqueológica más importante del mundo en el Palazzo Massimo alle Terme que alberga el Museo Nazionale Romano, hasta el Palazzo Merulana, que está dedicado al arte de la Italia del siglo XX y  contemporáneo. Recorriendo sus calles se descubre el Acquario Romano del siglo XIX, convertida en Casa dell'Architettura y que conserva en su interior un fragmento de las milenarias Mura Serviane, y la Porta Maggiore, con la cripta de Marco Virgilio Eurisace.
En este lugar se captura la atmósfera étnica de Roma. Los colores, los olores y los sabores de todo el mundo ofrecen múltiples alternativas: es posible confundirse en el gran mercado local cubierto, ir de compras en las tiendas de semillas, de platería y de objetos curiosos, o bien degustar las exquisiteces típicas o exóticas de las distintas panaderías, restaurantes, tabernas y locales de comida rápida de la zona, por ejemplo, después de un evento en los históricos teatros Ambra Jovinelli y Brancaccio.

El primer barrio de la ciudad, el de Monti fue construido sobre el Esquilino, el Viminale y parte del Quirinal. Representa una sección de la antigua Roma en la que se ubicaba la Suburra, el popular barrio "sub urbe", bajo la ciudad, o el primordial emplazamiento patricio en el Palatino.
En este barrio bohemien y animado abundan las callecitas más pintorescas, los restaurantes, los bares de vinos, las galerías de arte y las tiendas vintage. Es hoy una de las zonas más apreciadas por los romanos y los turistas por su ambiente moderno y creativo y es un lugar de encuentro de la movida romana.

Aquí se concentran los principales símbolos, sitios arqueológicos y artísticos de Roma: la Casa dei Cavalieri di Rodi, el Foro de Augusto, la Columna de Trajano, el Área Arqueológica de los Foros Imperiales, la Domus Aurea de Nerón, el Ludus Magnus, el más grande de los gimnasios de gladiadores de Roma, el Palazzo delle Esposizioni, el Palazzo della Banca d'Italia - Palazzo Koch y el Palazzo del Viminale, sede del Ministerio del Interior.
Recorriendo las plazas y las calles del barrio, encontramos varios templos importantes: San Giovanni in Laterano, la Catedral de Roma; San Pietro in Vincoli, con el Moisés de Miguel Ángel; las iglesias barrocas de San Carlo alle Quattro Fontane, de Borromini, y Sant'Andrea al Quirinale, obra de Gian Lorenzo Bernini; la antigua basílica de Santa Prassede; Santo Stefano Rotondo, la iglesia redonda más antigua en Roma;San Clemente, edificada encima de construcciones romanas de la época imperial y un Mitreo.
En la ciudad existen varios espacios naturales ideales para pasear o hacer una pausa: la Villa Aldobrandini, un impresionante jardín en la terraza con miras a los Mercati di Traiano, el Primer Museo de Arquitectura Antigua, la iglesia de Sant'Agata dei Goti y la Torre delle Milizie que junto con la llamada Torre del Grillo constituyó una de las torres militares de la ciudad, o el Parco di Colle Oppio, un auténtico "jardín arqueológico" con magníficas miras sobre el Coliseo y el Palatino.