La fuente de Piazza dei Quiriti

En 1924 la administración de la ciudad organizó un concurso para realizar 5 fuentes en barrios recién construidos. Para la fuente de la Plaza dei Quiriti, en el distrito Prati, se eligió el proyecto del escultor triestino Attilio Selva, uno de los grandes escultores de la época.

De inspiración renacentista y barroca, la fuente fue realizada en mármol de travertino y consta de tres estanques redondos de tamaño decreciente. En el primer cuenco circular, se levanta un balaústre artificioso, inspirado en motivos vegetales con grandes hojas de agua de las que destacan bandejas que retoman las líneas. Arriba, un cuenco convexo con un borde ancho simula la corola de una flor. En el centro, cuatro figuras femeninas, desnudas y de rodillas, que, como cariátides, sostienen el estanque superior con encima una piña de mármol por la que brota el agua. Sobre sus cabezas reposan unas almohadillas redondas que evocan las que se usan para transportar los cántaros de agua.

La desnudez y la pose de las figuras suscitaron encendidas críticas y estupor desde su realización, hasta el punto de tener que aplazar de unos meses la inauguración para atenuar los agravios “morales” impulsados por las asociaciones católicas y por la prensa.