Basílica y Sepultura de Pianabella

La basílica se encuentra en el moderno cementerio de Ostia, en una explanada marcada por la presencia de cinco protuberancias a distancias irregulares, correspondientes a antiguas calles cementerias. En efecto, esta zona está riquísima de tumbas de edad imperial, y constituyó a partir del siglo II d.C. la expansión de la cercana necrópolis Laurentina. Los baches serían formados por las alineaciones de las tumbas a lo largo de las calles. De esta zona provienen numerosos sarcófagos, actualmente visitables en el Museo Ostiense. La basílica cristiana fue descubierta en 1976 y ha sido objeto de excavaciones recientes.

Construida entre finales del IV y principios del siglo V d.C. sobre un área sepulcral pagana está constituida por una única nave precedida por un pórtico. En el interior se encuentra un recinto funerario con cientos  de entierros en la inhumación (formae) dispuestos en cuatro órdenes superpuestos. Entierros similares se encuentran bajo el suelo del ábside. En el exterior se han excavado numerosas tumbas paganas y cristianas, cortadas en parte por la iglesia. El edificio parece haber sido utilizado hasta el siglo VI hasta la edad carolingia (VIII-principios del siglo IX d.C.).

Todavía hoy su identificación es incierta; según algunos estudiosos es la  la basílica dedicada a los Santos Pedro, Pablo y Juan, según otros es la la basílica de San Lorenzo.