Columna de la Inmaculada

En Piazza Mignanelli, a pocos pasos de la Escalinata de Trinità dei Monti, se encuentra la columna dedicada al dogma de la Inmaculada Concepción, inaugurada el 8 de diciembre de 1857.

Fue encontrado en 1777 en el convento benedictino de Santa María en Campo Marzio: su elaboración incompleta indicaba que probablemente nunca había sido utilizado y tal vez todavía se encontraba en los restos de un taller de mármol. Permaneció apartado cerca del Palacio Montecitorio durante unos ochenta años, hasta 1854, cuando el Papa Pío IX decidió erigir un monumento en honor de la Virgen, tras la promulgación del dogma que sancionaba la concepción sin mancha de la Virgen María.

Las obras fueron financiadas por Fernando II, rey de las Dos Sicilias, como gesto simbólico de reconciliación con la Iglesia tras la interrupción de la antigua tradición de la Chinea (el tributo pagado al Estado de la Iglesia), y encomendadas al arquitecto Luigi Poletti, quien diseñó una obra bastante elaborada. La columna cipollino veteada, de aproximadamente 12 metros de altura y casi 1 metro y medio de diámetro, descansa sobre una base de mármol que lleva cuatro bajorrelieves que recuerdan la Anunciación, el sueño de San José, la coronación de la Virgen y la promulgación. del dogma. En las esquinas hay estatuas de los profetas Moisés, Isaías, Ezequiel y David; arriba, los emblemas de los evangelistas sobre un capitel sostienen el globo terrestre y la luna, sobre la que se alza la imponente estatua de bronce de la Virgen, de 4 metros de altura, obra del escultor Giuseppe Obici.

El izado de la columna fue obra de 220 bomberos, quienes dieron vida a la tradición con la que, cada año, los bomberos rinden homenaje a la Virgen con una guirnalda de flores frescas con motivo del 8 de diciembre.

Photo: Redazione Web Turismo Roma