Pocos años antes de la Brecha de Porta Pia que determinó el poder temporal del papado, en una zona del distrito Trastevere por entonces ocupada por jardines y casuchas, el último Papa-Rey Pío IX Mastai-Ferretti confió al arquitecto Andrea Busiri Vici la construcción de una fuente ornamental de una enorme plaza semicircular, dominada por el imponente palacio de la Manifactura de los Tabacos (hoy sede de las oficinas de las Aduanas y Monopolios) y ubicada en el centro del nuevo “Barrio Mastai” también diseñado por Busiri Vici por voluntad del papa.
Elegante y armoniosa, aunque no sumamente original, fue la primera fuente monumental moderna que se levantó en el distrito después del Fontanone del Janículo de principios del siglo XVII. Para realizarla, el arquitecto se inspiró en la fuente más antigua de la cercana plaza de Santa María en Trastevere, basándose en el repertorio de finales del siglo XVI de Giacomo Della Porta para los elementos arquitectónicos y el estilo barroco de los decorativos.
Sobre una rampa octagonal con tres escalones altos, descansa un estanque, también octagonal, decorado con el escudo de armas de Pío IX y cuatro placas con el nombre del pontífice y del año 1865, fecha de la terminación de la obra. En el centro, cuatro delfines con las colas entrelazadas sostienen un elegante cuenco adornado con cuatro pequeñas cabezas de león que vierten el agua en el estanque de abajo. En cambio, el cuenco de coronación está sostenido por cuatro cupidos con cola de sirena.
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